Vecinos de nuestra ciudad volvieron a comunicarse con cronistas de estas páginas, porque no es la primera vez, para expresar su opinión respecto de pasto “exageradamente alto” en varios sectores del Parque San Carlos, incluso frente al mismo Castillo “se puede ver un pastizal que desmerece el lugar y presenta un aspecto de abandono”, dijeron.
Además se quejaron por el supuesto “precio demasiado alto” en productos que venden en el drugstore que está a metros del Castillo de San Carlos.
María Mercedes Jurado, vecina de la zona, en contacto con cronistas de El Sol-Tele5 y CABLEINFORMACION, expresó con preocupación que ya no se ve movimiento de gente para la limpieza, mantención y mantener el pasto costo como fue toda la vida en Parque San Carlos. Fue lamentable ver en esta Semana Santa, un fin de semana turístico donde se vio muchísima gente recorriendo el parque y como pocas veces lleno de gente pero en muchos sectores con un aspecto de abandono con un tremendo pastizal”, expresó María Mercedes, al tiempo que puntualizó: “yo personalmente le pregunté a una de los chicos que estaba en la puerta del Castillo y me respondió que no se corta el pasto porque desde Parques y Jardines dicen que las máquinas dañan el terreno”, pero sin embargo, dijo María del Lujan “mis hijos solían correr o andar en bicicleta por lugares donde hoy es imposible por el abandono”, dijo y remató: “es una vergüenza que, justamente el frente del Castillo está así abandonado y con un enorme pastizal, justamente es la foto que todos quiere pero entre el pasto y los yuyos es imposible sacarse una foto de recuerdo”, citó como ejemplo la mujer.
“$7MIL POR MEDIO KILO DE YERBA”

Un visitante al Palacio San Carlos ayer por la tarde, se identificó como Mauricio Monsalvo y dijo vivir en La Bianca. Expresó ante estas páginas haberse sorprendido y a la vez se retiró molesto del drugstore que está a pocos metros del Castillo. “Fuimos con mis padres, mis hermanas y sobrinas a tomar mates al costado del Castillo pero lamentablemente -confesó Mauricio- me olvide de poner la yerba en la mochila, así que concurrí al quiosco que está a pocos metros pero enorme fue mi sorpresa cuando me quisieron cobrar 7 mil pesos por medio kilo de yerba, siendo que en un comercio cuesta, según la marca, entre 4 y 5 mil pesos. Pero en ese lugar me pidieron 5 mil pesos por medio kilo de Playadito”, contó el joven. “Por supuesto que no le compré y le manifesté mi indignación a la chica que me atendió, que justo estaba hablando con el Director de Turismo´”, dijo y concluyó valorando que “por suerte las chicas que estaban en el gazebo a la entrada del castillo me convidaron con yerba”, concluyó.