- Publicidad -
Desde la corporación para defender a «peronchorros» argumentan cosas como que: «detrás de una supuesta intención de luchar contra la corrupción se esconde un motivo despreciable, amedrentar y disciplinar al peronismo y a sus dirigentes», pero no mencionan la palabra «INOCENTE», porque Urribarri no es inocente y está preso por corrupción.

Desde la corporación para defender lo indefendible dicen que: «hoy, con dolor e indignación, vemos cómo sectores de la justicia avasallan el derecho y la dignidad de defenderse de nuestros compañeros Sergio Urribarri y Juan Pablo Aguilera. Compañeros que conocemos porque hemos militado con ellos y que están siendo sometidos a medidas arbitrarias», expresan desde la corporación, esquivando la palabra «INOCENTES».

«Hacemos llegar nuestra solidaridad con los compañeros injustamente privados de la libertad y destacamos la dignidad y entereza con que enfrentaron este proceso tan lamentable. Tanto Urribarri como Juan Pablo Aguilera, y también Pedro Báez, han respondido de manera irreprochable ante la justicia cada vez que se los requirió, cumplieron cada una de las restricciones que se les impuso y no hubo de parte de ellos la más mínima acción que pusiese en dudas su voluntad de responder ante la justicia. Por eso sostenemos que es arbitraria e injusta su detención», argumenta la defensa de la corporación que expresa su mal humor cuando detienen algún peronchorro.
En ese mismo contexto, la corporación se cree que tiene atributos para exigirle a la justicia que: «actúe en el marco del respeto a las normas constitucionales y se garantice el derecho al debido proceso. Al haberse concedido el recurso extraordinario ante la Corte Suprema de Justicia de la Nación, la condena no está firme y la prisión preventiva no tiene más sustento que seguir castigando a los compañeros», expresan desde la corporación que gambetea al mejor estilo Messi la palabra «INOCENTE».
Con el argumento de que: «nuestra historia nos exige acciones y sacrificios. Los peronistas sabemos que la persecución y los ataques de los poderes fácticos son el precio que se paga por ser leales al pueblo, porque nada grande se consigue sin valentía» y en ese contexto «pedimos justicia plena, respeto a los derechos de los compañeros y de todos los ciudadanos y ciudadanas a una defensa justa», esgrimen desde la corporación que nunca mencionó la palabra «INOCENTES».
- Publicidad -